domingo, 24 de enero de 2010

EN UN MOMENTO DIFÍCIL PARA LA CONVIVENCIA, para el megafono tiene especial importancia la respuesta solidaria de la plantilla de Madrid

POR IGUALDAD DE TRATO A LAS PERSONAS: NO SON los que viven en la parte mas "jodida" de la organización quienes nos quitan nuestros derechos...

XENOFOBIA: hágala usted mismo, artículo de Antonio Orejudo en Público, 23.01.10

Hola, amigos, hoy estoy aquí para explicaros cómo se puede organizar un buen conflicto racial, con muertos y todo, en un país donde en principio no hay ningún problema de racismo. Lo primero que tenéis que saber es que no importa que un problema no exista: si vuestros políticos, los políticos que habéis votado, son verdaderamente unos malnacidos, sabrán perfectamente cómo encabronar al personal. Bien, dicho esto, pongámonos manos a la obra. Lo primero que necesitamos es una buena crisis económica. Si es de origen financiero, mejor, porque la gente no se atreve a quemar bancos, y entonces tiene una rabia, así, como latente, que no sabe qué hacer con ella. No la apaguéis, que luego nos será muy útil, ya veréis. Bien, tenemos la crisis y tenemos los políticos malnacidos, alguno de ellos con aspecto de persona respetable. Ahora sólo hay que esperar un año o dos a que a la gente se le vaya acabando el paro. Y entonces viene lo más importante. En cuanto el político malnacido detecte el más mínimo indicio de malestar social, tiene que salir a la palestra y decir en nombre de la Responsabilidad y de la Seguridad y de la Bondad: oye, ya está bien de empadronar inmigrantes ilegales, que nos quitan las plazas del cole, abarrotan la sanidad pública y se comen todo el turrón. Y entonces la gente, que hasta ese momento no se había planteado nada de eso y pensaba que todos estamos jodidos, pero que más jodidos están los inmigrantes ilegales, esa misma gente empezará a mirarlos como la causa de todos los males (junto a Zapatero, claro). Y aquí es donde se puede utilizar la rabia que no hemos usado contra los verdaderos causantes de nuestro mal. Se sopla un poco, que soplen todos los políticos malnacidos, y ya veréis cómo prende.

3 comentarios:

No me resigno dijo...

Parte de su trabajo, el de los gestores de los RR.HH, es fragmentarnos a los trabajadores, y nuestra obligación es tomar conciencia de ello y como trabajadores, combatir la estratificación y practicar la solidaridad que nos da fuerza y nos hace sentir mejor.

un desigual dijo...

La verdad es que es tema de los negros oscuros y los negros negros y los negros medianoche y los blancos relucientes cada día me j... mas. Todos venimos al mundo por un agujero idéntico y nos vamos de él al mismo abismo. Y los que además vivimos en el entretanto en la parte chunga de la vida compartimos el mismo desatino (unos en burro y otros en caballo, eso sí), entonces ¿porqué c... miramos con desprecio o con miedo o con suspicacia al que tenemos al lado que no es sino otro desgraciado como uno mismo buscando solo un espacio para vivir en paz?

La resistance dijo...

desigual yo te respondo:

porque somos muy tontos, unos se creen que por ocbrar un poco mas otrabajar en otra empresa son mejores o estan por encima de los demas. A esos solo les digo una cosa, que al final de la partida el rey y el peon descansan en la misma caja. Y los peones somos mas numerosos que los reyes.