El ‘número dos’ de la CEOE y presidente de CEIM, Arturo Fernández, ha sido acusado por un grupo de sus empleados y exempleados de recurrir a los sobres de dinero negro para pagar parte de sus nóminas. Comisiones Obreras (CCOO) ya denunció irregularidades en los pagos del Grupo Arturo Cantoblanco, propiedad de Fernández, en abril y mayo de 2009 y las autoridades laborales abrieron una investigación que confirmó esta práctica.
En concreto, la Federación de Hostelería de CCOO Madrid presentó una reclamación ante la Inspección de Trabajo asegurando que los empleados del Grupo de Arturo Fernández en los centro de trabajo del Tanatario de la M-30 y el Palacio de Congresos de la capital estaban percibiendo las horas extraordinarias como pagos en negro, sin cotizar las cuotas correspondientes. El servicio jurídico del sindicato también denunció un uso abusivo e injustificado de las horas extraordinarias.
La Inspección de Trabajo resolvió la investigación verificando los hechos denunciados y obligó a Fernández a pagar las cotizaciones correspondientes a los últimos cinco años de todas las horas que no habían sido incluidas en las nóminas de los trabajadores afectados. Además, el presidente de la CEIM tuvo que regularizar el modo en el que computaba las horas extraordinarias en las nóminas de los empleados de esos dos centro de trabajo.
•Los hechos que se denuncian ahora ya ocurrieron en 2009. Los denunciamos y la Inspección de Trabajo nos dio la razón•, afirma Paloma Vega López, secretaria general de la Federación de Hostelería de Comisiones Obreras Madrid. •Pero ya entonces pedimos a Trabajo que hiciera una investigación más amplia que afectara a todos los centro del grupo, no sólo a los del Tanatario de la M-30 y el Palacio de Congreso•, concluye.
La Cadena Ser ha informado hoy de que el vicepresidente de los empresarios paga los complementos por responsabilidad y las horas extra en ‘B’ dentro del grupo Cantoblanco, la empresa de que preside y que se encarga de la restauración de algunos hospitales y de la Asamblea de Madrid. Se trataría de una práctica habitual que ha llegado a alcanzar la mitad del salario de los denunciantes, que no ha hablado hasta ahora por miedo a perder sus puestos de trabajo. De hecho, la mayoría prefieren ocultar su identidad.
El modus operandi coincide en todas las denuncias y remite a los hechos de 2009. Fernández paga a sus cocineros, camareros y encargados parte del sueldo en un sobre y a mes vencido. De acuerdo con estos, los pagos en 'B', que no aparecen reflejados en la nómina y no computan a la Seguridad Social ni a Hacienda, se realizan por dos conceptos: horas extras y complementos de responsabilidad. En muchos casos, el dinero recibido por las horas extraordinarias que realizan los empleados alcanza hasta un tercio de su sueldo.
Los sobres utilizados para la operación son iguales. El grupo recurre a un sobre blanco, sin membrete que lo relacione con ninguna empresa, con el nombre del trabajador y la cantidad de entre 100 y 700 euros que le corresponde ese mes. En el interior, aparte del dinero en metálico, en algunos casos se introduce la nómina. Los gerentes o jefes de zona son los encargados distribuirlos entre los trabajadores. Según las denuncias, toda esta contabilidad B queda reflejada en una hoja de cálculo de Excel.
